¿Sabes cómo decorar un salón pequeño y aprovechar al máximo cada uno de sus rincones? Descubre cómo conseguir una estética moderna, bonita y, a la vez, conseguir un espacio que no resulte agobiante. Te damos unos consejos prácticos.

La importancia de la luz

El salón es el lugar donde pasamos más tiempo. Para que estemos cómodos y a gusto, es indispensable que esté bien iluminado. Para lograrlo, potencia al máximo la entrada de luz natural. Así, lograrás más sensación de amplitud.

Igualmente, no te olvides de la luz artificial. Coloca diversas lámparas para crear el ambiente perfecto. Si las eliges artesanales, podrás personalizar sus características y dimensiones. De esta manera, encajarán sin problemas en un espacio de reducidas dimensiones.

Los colores para decorar un salón pequeño

Apuesta por el blanco y por tonos suaves y neutros para renovar tu salón. De esta manera, será más luminoso y ganará en sensación de amplitud. De todos modos, siempre es interesante añadir algunos toques de colores vibrantes para proporcionar más vida al ambiente. Eso sí, úsalos solamente en elementos decorativos concretos para evitar saturarlo.

Los muebles

No todos los muebles son aptos para un salón pequeño, por muy bonitos que sean. Al decorar este espacio, debes planificar la elección de piezas que sean muy funcionales y tengan el tamaño adecuado.

Coloca solamente los muebles indispensables y piensa siempre que no sean excesivamente oscuros, porque sobrecargarán la estancia. En cambio, un tono suave ayudará a dar calidez al ambiente. Porque en el mundo de la decoración, como en tantos otros el lema es “cuando menos es más”

Como puedes comprobar, decorar un salón pequeño con éxito requiere de imaginación y buen gusto, pero ante todo de una buena planificación práctica. De esta manera, la falta de espacio dejará de ser siempre un problema.